Simone de Beauvoir.

Simone de Beauvoir, considerada la gran dama del feminismo francés, nació en París el 9 de enero de 1908. Inspiración y pareja del famoso Jean Paul Sartre, escribió novelas y ensayos, así como biografías sobre temas políticos, sociales y, por supuesto, filosóficos.  

Su primera novela, La Invitada (1943), donde aborda temas tan interesantes como la libertad, la acción y la responsabilidad individual. Estos temas también serán los protagonistas de posteriores novelas de la autora como La sangre de los otros (1944) y Los Mandarines (1954), una de sus mejores obras.
Además, Beauvoir escribió cuatro obras autobiográficas que sirven de ejemplo para expresar la idea de que cada uno es responsable de sí mismo. Dentro de estas destacan Memorias de una joven de buena familia (también conocida como Memorias de una joven formal, 1958) y Final de cuentas (1972). Sin duda alguna, sus ensayos más destacados son El segundo sexo (1949), donde realiza un profundo análisis del papel de la mujer en la sociedad del momento, La Vejez (1970) y el polémico La ceremonia del adiós (1981).

En 2008 se creó en su honor el Premio Simon de Beauvoir por la libertad de las mujeres.

Un variadito de mi familia y yo.....

Brillante.

 Great mins discuss ideas.
Average minds discuss events.
Small minds discuss people.


Eleonor Roosevelt.

Tiempo de ser INVISIBLE para el mundo.

Yo sé que existo, sin necesidad de que los demás tengan que celebrar mi existencia, el hecho de respirar, comer y vivir, además de otros signos vitales.
El pasar desapercibido tiene sus ventajas, te quita tensión y estrés por ser perfecto y hacer lo que se espera de tí, digo, ser invisible te permite no seguir los protocolos sociales y evitar ser presa de críticas.
No me molesta, en este momento ser invisible, me parece cómodo porque me permite seguir viviendo en mi planeta, soñando despierta, siguiendo mis soliquios mentales desconectada del mundo y principalmente no tengo que vestirme para nadie, sin llamar la atención paso desapercibida de todos en esta gran ciudad, gente mala, gente buena, simplemente soy un fantasma en el radar de toda clase de vida.
Lo gracioso es que para muchos podría ser yo una de las personas mas cultas e inteligentes, una cuya conversación es grata, pero cuando estoy en estado invisible, a nadie le interesa escuchar mi opinión, eso me parece cómico. Extraño, pero ser "Visible" hace que todos quieran escucharte aunque no tengas nada que decir y por el contrario si tienes mucho que decir sin la imagen correcta te exilia al espacio exterior.
Es extraño ser invisible mucho tiempo y luego regresar al radar de la vida no inteligente.
La verdad no se si me da gusto o no, obviamente me enfoco al aspecto superficial en que únicamente te pela el mundo en función a luces y no tienes nada que hablar.